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domingo, 13 de octubre de 2019

NOCHE DE TORMENTA

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          Fue el día de mi onomástica. Aprovechando la bonanza del tiempo, lo iba a celebrar cenando en la terraza de una pizzería, así podríamos pasear al perro y después sentarnos tranquilamente a cenar con los chicos. Pero un poco antes de salir, el cielo, por lo habitual sereno y despejado, comenzó a llenarse de nubes cada vez más gordas y negras. Alarmada, por si era necesario cambiar de planes, consulté el móvil para ver la previsión del tiempo. No aparecía la lluvia por ningún sitio, de modo que me quedé más tranquila y pensé que sería una falsa alarma. Sin embrago, no habían pasado ni cinco minutos cuando unos goterones gordos como melones empezaron a estrellarse contra el suelo y un relámpago rasgó el cielo de una punta a otra. La cosa se torcía. Miré por la ventana, parecía que era algo pasajero, pues a lo lejos se divisaba claridad. Quizá solo era cuestión de esperar un ratito a que escampase y ya está.

          Pero el tiempo pasaba y la tormenta no se decidía a marchar, así que no tuve más remedio que resignarme, dejar lo de la cena en la terraza para otro día y cambiar de planes.

          Al perro no había más remedio que sacarlo, pues de estar toda la tarde metido en casa se subía por las paredes. Pacientemente esperé a que se produjera una clarita para pasearlo por el parque del barrio que está cerca de casa, pues por otro sitio no me atrevía dadas las condiciones meteorológicas.

          Así lo hice en cuanto abrió un poco y nada más salir ya pude comprobar la magnífica noche que se abría a mis pasos. Las calles estaban desiertas, ni perros, ni gente, ni nada, la temperatura ideal, el ambiente húmedo y limpio, los relámpagos a lo lejos, iluminaban todo el cielo de vez en cuando. ¡Una noche perfecta para salir! Para dejarse abrazar por esos momentos de calma que nos hacen estar con nosotros mismos, y pensar, reflexionar, divagar, imaginar, recordar, soñar...¡lo que apetezca!

          Recorrí la calle solitaria, al pasar por la puerta de la iglesia, un grupo de gente salía de misa hablando con el párroco. Eran pocos y se disiparon en unos minutos. Otra vez la soledad y el redoble a lo lejos de los truenos diciendo adiós. Continué mi delicioso paseo y llegué hasta el parque. Era una delicia verlo así, recién mojado y sin gente. Pasear por los sitios que siempre están abarrotados de chiquillería corriendo y gritando como locos, sin que nada me enturbiara los dulces pensamientos que me llevaron a recordar otros parques y otros paseos en ambientes similares hace ya "miles  de años".

          Para mi sorpresa el kiosco estaba todavía abierto con un par de mesas ocupadas por los que habían aguantado estoicamente los truenos y relámpagos sin salir corriendo.

           -Estaba lleno a rebosar, pero en cuanto han caído cuatro    gotas la gente ha salido pitando. Sólo han quedado cuatro resguardados sobre el techo de la barra- me explicó el camarero.

          Decidí quedarme. La noche era magnífica. ¡Cuándo me vería en otra similar! Pedí un té calentito y me dediqué a disfrutar. simplemente disfrutar. En la televisión daban un partido y los pocos parroquianos estaban atentos a las jugadas. Sólo yo distraía mi atención viviendo el presente, disfrutando de la delicia del tiempo y el momento. Hasta el perro estaba tranquilo y se sentó a mi lado, como si él también entendiera.

          Así pasé un ratito, demasiado corto para mi gusto, porque lo hubiera alargado más de haber podido, pero otra vez los goterones empezaron a caer y temiendo la llegada de otra tormenta que nos pusiera calados hasta los huesos, emprendí el camino de casa.

          Cuando llegué, mi día de onomástica estaba finalizando, no había podido ir a cenar con mi familia, pero había tenido un regalo especial, ese maravilloso paseo ofrecido por la Naturaleza que no se puede comprar con dinero.

50 comentarios:

  1. No hay nada como disfrutar del momento. Un beso

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  2. Cuantas veces salen mucho mejor las improvisaciones que los planes hechos.Un bonito y relajante relato.Besicos

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    1. En este caso la improvisación salió de maravilla. Un abrazo, Charo.

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  3. El que tengo instalado yo en mi móvil tampoco es fiable, la verdad. Están cayendo chuzos de punta y se empeña en que hace un sol espléndido.
    Besos.

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    1. El de mi móvil falla un montón, ya voy a terminar por no hacerle caso. Hoy dece que va a llover, pero hasta el momento no hay ningún indicio. Un abrazo, Macondo.

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  4. Si ayer fue tu cumple vaya mis felicitaciones y desde luego ayer en mi ciudad tampoco daban lluvias pero a eso de las diez de la noche como de repente lo truenos empezaron a sonar seguidos de lluvia en gran cantidad ,solo duro unos diez minutos para después a las dos horas volver a empezar de igual modo ..el tiempo loco loco esta ..
    Espero que disfrutaras de ese momento de soledad oliendo a tierra mojada .
    Un fuerte abrazo y un tirón de orejas muakk.

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    1. Fue mi santo, mi cumple es otro día, pero muchas gracias por la felicitación, Campirela. Ya veo que el tiempo anda revuelto en todas parres. Un besito.

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  5. Has tenido una agradable compensación, has tenido un final del día estupendo, felicidades de nuevo. Por aquí deseando que vengan esas negras nubes, con goterones como melones, jaaaaaaa, y los truenos, con su mágica luz veloz e impactante...

    El olor a tierra mojada es una delicia ¡Qué envidia, mi niña!

    Un beso.

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    1. Pues si, el final del día estuvo muy bonito. Muchas gracias por la felicitación, Mª Carmen. Un beso.

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  6. Me alegra que igual hayas podido disfrutar.
    Cariños Rita

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  7. Estos momentos de cambios son impresionantes, siempre hay que estar preparada para ellos.
    Un abrazo

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    1. El otoño es así, impredecible. Un beso muy grande, Mari- Pi- R

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  8. Con tormenta o sin ella, disfrutemos el ahora, sacando lo mejor de él.
    Ya tengo ganas de rozar la normalidad en este tema, mi piel pide ya algo de frío.
    No hay nada más hermoso que percibir ese perfume a hierba encharcada de agua.
    Hoy aquí en Murcia a 30º
    Feliz comienzo de semana
    Un beso Rita

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    1. Hay que disfrutar cada minuto con lo que venga, de lo contrario pasamos por la vida sin haberla vivido. El tiempo que hace no es normal, debe ser que lo del cambio climático va muy en serio.Un abrazo, Carmen

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  9. ¡Hola!
    Qué paseo tan bonito, y desde luego el perrito entiende, él también lo disfrutó.
    Muy feliz semana.

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    1. ¡Ya lo creo que entiende el perrito! El también disfrutó lo suyo. Un beso muy grande , Marigem.

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  10. Disfrutar el momento, el instante... qué bonito. Me encanta Rita, y esa imagen es evocadora. Felicidades con retraso y espero que lo celebrases junto a tu familia muy pronto. ¡¡Besos!! : D

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    1. Muchas gracias , Margarita. hay que vivir en cada momento lo que toca, y si es bonito pues disfrutar de ello lo más posible. Un abrazo.

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  11. De vez en cuando hay que romper con las normas y las tradiciones y vivir el momento. La naturaleza es sabia y te hizo un regalo que yo aprecio mucho, la tranquilidad.
    Yo lo celebré el mes pasado en un restaurante ruso. Me gusta cambiar.
    Felicidades y un beso.

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    1. Muchas gracias, Airblue. A veces romper con lo previsto tiene sus ventajas y una se encuentra con sorpresas que no espera. Un abrazo,

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  12. Felicidades por tu onomastica, yu muchas felicidades por el valor del regalo
    un beso

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  13. Muchas gracias, Mª Jesús. Un beso muy grande

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  14. También opino que fue una preciosa manera de celebrar, y eso gracias a tu sensibilidad, que te permitió disfrutarlo.

    Felicidades!!

    Y besos

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    1. Muchas gracias , Alís. A veces las mejores cosas las tenemos ahí mismo y no nos damos cuenta. Besos.

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  15. Un delicioso paseo que te permitió disfrutar junto a tu perro de un parque con aroma a recién mojado y un té caliente ¡Un regalo genial!.

    Besos.

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    1. Al final la celebración n fue como se había pensado pero tuvo un final feliz. Muchas gracias por tu visita, Conchi. Abrazos.

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  16. Disfrutar cada momento, es lo que tenemos que hacer todos.
    ¡Genial!

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    1. Si lo hiciéramos más veces disfrutaríamos más de la vida. Besitos, Marisa.

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  17. Mereces ser feliz. Haces bien disfrutando de los momentos que la vida de pone por delante...

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  18. Felicidades, si era real. La noche te regaló la magia de las lluvia limpiando aceras y alimentando paseos.

    Un abrazo

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    1. Muchas gracias, Albada. Esta vez la Naturaleza me hizo el regalo. Besitos.

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  19. Fue una manera distinta de celebrarlo, lo que no se prepara sale siempre mejor.
    SAludos.

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    1. Tienes razón, Manuela, cuando se improvisan las cosas parece que gustan más que cuando ya está todo programado. Besitos.

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  20. Fue un paseo maravillosos y los dos, tu perro y tu lo disfrutasteis, mientras otros veían el futbol.
    Unos y otros, todos lo pasasteis de maravilla. Ya harás esa cenita en otro momento.
    Un beso.

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    1. Yo prefiero el paseo, la verdad. El fútbol no me gusta nada. Y lo de la cena se puede hacer cualquier otro día. Como dice el refrán " hay más días que longaniza", je, je. Un beso, Mª Ángeles.

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  21. Siempre he dicho querida amiga q las cosas más bonitas del mundo son las q no se pueden comprar y esa noche q nos cuentas es una de ellas me ha encantado como lo has contado y como bien dices eso es un regalo q ni vale dinero Mil besicos preciosa

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    1. hay muchos regalos maravillosos que no se compran con dinero, tienes razón. Pero hay que saber verlos. Un abrazo, María.

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  22. Bonita celebración, está claro que los instantes perfectos no tienen precio y estoy segura que tu perrín también entendió perfectamente ese instante compartiéndolo contigo.

    Me encanta como escribes, besines utópicos, Irma.-

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    1. Muchas gracias, Inma. Yo estoy segura que los perros y los animales en general entienden mucho más de lo que pensamos. Un besito muy grande

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  23. Es una pena que tengamos que estar pendientes del tiempo para poder disfrutar haciendo lo que más nos gusta, pero en este caso, por lo menos, permitió dar un paseo relajante y aprovechar la tregua climatológica para descansar y dejar la mente volar. Y en compañía de un fiel amigo. A veces no nos queda más remedio que cambiar los planes. Es cuestión de saber resignarse y sacar provecho de lo que tenemos a mano. Ya lo dice el refrán: si quieres una naranjada pero solo tienes limones, hazte una limonada, je.je.
    Un relato muy bonito.
    Un abrazo.

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    1. Muchas gracias, Josep. A veces tenemos alrededor mil cosas buenas para disfrutar y no nos damos cuenta de ello. De ves en cuando vienen bien estos momentos relajantes. Un abrazo

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  24. No hay mayor placer que disfrutar del petricor, ese olor a tierra mojada después de una intensa tarde (o mañana de lluvia). Buena forma de celebrar la onomástica.
    Un saludo

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    1. Si que fue una forma muy bonita de celebrarla, Carmen, y no sabía que le petricor es el olor a tierra mojada. Ya sé una cosa más. Un beso.

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  25. No importa el tiempo que haga. Disfrutar los momentos depende solo de nosotros. ( A mi perro no lo dejan entrar en los bares de mi barrio).

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    1. Al mío tampoco. El pobre se tiene que quedar siempre fuera, por eso buscamos terracitas al aire libre donde le permitan estar. Espero que la cosa cambia alguna vez. Son animales perfectamente educados y se saben comportar. Gracias por tu visita, Marcos. Feliz día.

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  26. No hay mal tiempo para una buena cara. Disfrutar de momentos especiales es tan especial y asombroso como sentirse tan a gusto con tus relatos. Un abrazo muy otoñal.

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  27. Lo primero, si ha sido tu onomástico felicidades atrasadas. Esta semana he estado liado con pruebas médicas preoperatorio y demás. Estoy ahora comentando varias entradas. Por otra parte me ha gustado el relato, incluso por una anéctoda que no sabías y es que, Leonid Afremov, el artísta que pintó la ilustración del post, es uno de mis pintores favoritos. Y esta es una escena muy bucólica. Saludos.

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